martes, 3 de marzo de 2015

viernes, 30 de enero de 2015

Decumbere bere bere

Así, decúbito espatarrá he estado, todo lo ancho y lo poco larga que soy, moreneando en la playa. Aquí en mi ciudad con un frío medio pelón y yo sudando piña colada y daiquiris horteras, sin pudor. Como para escribir en el blog... ustedes disculpen, o no...

Las vacaciones de escapada son así, de escapada breve, cuando te quieres dar cuenta ya estás otra vez en tu realidad, que no es que la arenita que quitas casi con pena de las orejas y del objetivo de la cámara no sea real, no; es que es una realidad tan efímera...




Ya estoy otra vez al cien por cien en funcionamiento on, yendo , viniendo, estando... estando orgullosa de la gente que se ha rebelado en mi barrio contra las nuevas marquesinas del ayuntamiento. Marquesinas que impiden tumbarse a sin techo bajo techo, que impiden sentarse a cuatro personas como antes, que son todo anuncio y techo plano, que son fuente de ingresos publicitarios sin más. Porque las que había valían perfectamente, y valían también para un sueño de unas horas para tantos y tantas que veo de madrugada bajo cartones; los que nunca se quitarán arenita ni sudarán piña colada.

De la noche a la mañana todo mi barrio amaneció sin la barrera intermedia del asiento de cada marquesina, sin destrozos, destornillando sin más la crueldad e injusticia del que tiene sitio donde tumbarse y no concibe otra realidad , ni le importa claro.

domingo, 21 de diciembre de 2014



Hoy, día previo a la cantinela de niños y niñas de uniforme sacando bolitas de un bombo y cantando a gritos combinaciones de números que hacen ricos a unos pocos y dejan a la mayoria tal cual ,llego a casa con más peso que de costumbre.
Y no era la bolsa de la compra, que también.
Ayer ayudando a un niño de cinco años a hacer la carta a  sus Majestades de Oriente  la criatura lo que pedía era comida para la casa . Al animarle a añadir más cosas a esa petición , el niño piensa un poquito y pide  que se escriba " papel."  Pero papel para limpiarse, papel higiénico. No cartulinas de colores o folios en los que dibujar.
Al final pidió un coche teledirigido, rojo, con ruedas gordas y muelles y una antena...
Hoy me consulta si queda claro que además del coche , hemos puesto lo de la comida.
No sé cómo titular esto.


miércoles, 19 de noviembre de 2014

Zona B2 o Menuda porquería de título.

Cuánto he viajado este año. En las   fronteras mentales de los diciembres quieras o no haces recuento de lo movido del año; por dentro o por fuera. He salido y he entrado de  la ciudad, del país, del continente, y de mí. Sin embargo apenas hago constar en este diario incompleto las memorias y sabores de esos mundos que me asombran y encandilan.
  Hace poco me impactaron mis compañeros de los viajes chiquitos , los diarios, los anodinos, los compañeros de buses, trenes y metros de seis de la mañana. Esos de colonia reciente y doblez de almohada , ojos de sueño y planificación del día. A un lado un obrero con lápiz en la oreja ya desde hora temprana se frotaba con angustia una cara de facturas que no cuadran y jornada dura. Sus manos le delataban.
Al otro lado , una mujer tejía con largas agujas como si no hubiera mañana,  con cuerpo y gesto relajado en el traqueteo del vagón, como si pudiera permanecer todo el día en esa frenética  labor hipnótica.  Tan ajena esta vida pero tan igual a las antípodas que visito por placer en los otros viajes.  Ojeo algún periódico  que protagonizan los últimos corruptos y las cifras de sus escándalos de acá.La serenidad de la tejedora es universal, tanto como el egoísmo de los poderosos.